Khalil Gibran - poeta, pintor, novelista y ensayista libanés (1883-1931)
La ternura es la capacidad de
acariciar el alma, es bálsamo para heridas, la "terapia" perfecta,
precisa, propicia, y preciosa, no está en lo grande, ni en lo que se destaca,
está en lo sencillo, en esas pequeñas cosas de todos los días...
Un trato amable, delicado, una
caricia, un guiño, un beso son elementos que forman parte de la ternura; a
todos nos gustan esos pequeños detalles inesperados, que nos digan que nos
quieren, no porque tengamos dudas o lo ignoremos, sólo porque ese te quiero nos
hace sentir bien.
La ternura es a la vez un
impulso, un sentimiento y una actitud, es un fenómeno complejo que está en la constitución del hombre, algunos pueden pensar
que es de frágiles, de aquellos que no encajan en éste mundo actual, sin embargo
el vacío de ternura en la niñez es lo que resiente el comportamiento en los
adolescentes
La llave de apertura es el estar dispuestos a abrirnos para recibirla, eso... ya es una
manifestación de la ternura, nace de la capacidad de
asombrarse de lo bueno que hay en el mundo. No es privativo de la mujer
manifestar ternura, tambien el hombre puede hacerlo, es un movimiento que nos
arrastra hacia un camino repleto de sensaciones y sentimientos entre los que se
entremezclan la benevolencia, la aceptación, la calidez y el abandono, pero
también la confianza, el estímulo y el asombro.
Para seguir este camino lo único
que hay que hacer es abandonar los miedos, dejar atrás los prejuicios, y
enfrentarnos a todo cuanto pueda depararnos, no es solamente algo físico, es
una emoción sutil, una mirada de asombro, un saber dar y recibir.
La ternura necesita del silencio
que se crea cuando escuchamos lo que dice la otra persona o intentamos
participar de sus vivencias y sentimientos, es algo dulce y llena de confianza,
es una palabra, una mirada. Es lo que convierte la existencia del
otro en nuestra segunda piel, es el camino que nos conduce hacia la abundancia
espiritual.
No es un estado permanente, en
ocasiones somos reacios a demostrarla, sin embargo es la posibilidad de crear
un espacio en el que acoger al sabio y al niño que llevamos dentro; al héroe o
al príncipe, al hombre o la mujer que seguimos buscando en nosotros mismos.
La ternura es el arte de
"sentir" a la persona, al ser humano, es una actitud amable y
afectuosa repleta de humanidad, es eso que... vitaliza al viejo... duerme al
niño... y desarma al hombre.
Cultivarla, compartirla y
disfrutar de su magia, es capaz de generar una profunda felicidad
"Endurecerse sin perder la ternura jamás".
Ernesto "Che" Guevara - político, escritor, periodista y médico argentino-cubano (1928-1967)
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