"Aléjame de la sabiduría que no llora, la filosofía que no ríe y la grandeza que no se inclina ante los niños.”
Khalil Gibran -
poeta, pintor, novelista y ensayista libanés ( 1883 - 1931 )

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Utopías - ideales posibles y necesarios

"Yo creo que todavía no es demasiado tarde para construir una utopía que nos permita compartir la tierra”.
Gabriel García Márquez - escritor, novelista, periodista colombiano contemporáneo

El mundo actual vive una crisis de ilusiones, esperanzas, justicia y optimismo, a partir de crisis económicas que ponen en riesgo la supervivencia de muchos, pero en medio de ello no debemos dejarnos ganar por el desaliento manteniendo el objetivo de otro mundo posible, sabiendo que siempre vuelve a aparecer la luz, y por eso debemos tener expectativas, construir proyectos, seguir buscando nuevos horizontes y mantener sueños, aunque parezcan utópicos.

Aunque el Diccionario de la Real Academia define "utopía" como "proyecto o sistema halagüeño, pero irrealizable", la utopía no consiste en un mundo de sueños imposibles y al margen de la realidad, sino en la aspiración que todos tenemos a la realización plena de algo, amor, trabajo, vivienda, educación, ocio, política, sociedad, etc...

No tiene su origen en la ingenuidad, ni en la ignorancia, es simplemente la expresión de algo que aún no ha sucedido, no hay utopía sin esperanza.

Sin utopías reales y auténticas la vida carece de horizonte, pierde dinamismo y verdadero sentido. Con utopías la vida y el mundo son mejorables y por ello nos esforzamos, luchamos y hacemos de cada día un nuevo camino con la esperanza de una mejor vida.

La utopía no sólo es posible sino necesaria, es un ideal a alcanzar, y como dijo John Lennon en Imagine: Imagínate un mundo ... Será una utopia,  pero porque luchariamos sino es por acercarnos a ella?

Quizá no la veamos totalmente realizada, pero nos inyecta energía, vitalidad, nos da rumbo y sentido para seguir caminando, es imprescindible seguir manteniendo la esperanza de un mundo mejor, de una humanidad más ética y justa. No pongamos las culpas en la situación o las circunstancias, no abandonemos nuestras utopías, construyamos utopías posibles, promoviendo ideales que establezcan lo que debería ser, sin ingenuidad, con convicción y valentía para luchar por aquello que valga la pena.

"Qué tal si deliramos por un ratito
qué tal si clavamos los ojos más allá de la infamia
para  adivinar otro mundo posible

El aire estará limpio de todo veneno que no provenga
de los miedos humanos y de las humanas pasiones …" 

Eduardo Galeano - escritor y periodista uruguayo contemporáneo -La utopía – fragmento

No hay comentarios.:

Publicar un comentario