"Aléjame de la sabiduría que no llora, la filosofía que no ríe y la grandeza que no se inclina ante los niños.”
Khalil Gibran -
poeta, pintor, novelista y ensayista libanés ( 1883 - 1931 )

martes, 5 de noviembre de 2013

Infidelidad financiera - Ocultar gastos y mentir

"No estimes el dinero en más ni en menos de lo que vale, porque es un buen siervo y un mal amo" - Alejandro Dumas - escritor francés (1803-1870)


Las opciones al manejar dinero de la pareja varian a gusto de cada uno, tener un “pozo” común, distribuir los gastos, aportar y dejar que el otro se encargue de administrar, ahorrar lo que sobra, etc .
Al convivir se debe enfrentar el tema del manejo del dinero. Se “blanquea” todo? , o hay ocultamientos y mentiras?.

Cuando sólo uno trabaja es común que quien dispone del dinero lo ceda en cuentagotas. Este tipo de relación, -frecuente tiempo atrás cuando la mujer no salía a trabajar-, refuerza el orgullo del hombre gracias al trabajo y al poder del dinero “ganado con el sudor de la frente”, por poco que sea.

La desigualdad de roles, cuando uno “domina”, lleva a que el otro se “someta” y en apariencia cumpla al cien por ciento, pero hay que ser muy sumiso para no buscar un escape a la opresión.  Ocultamiento y  mentira son opciones salvadoras: guardar algo para un gusto personal, ayudar a los hijos, prestar plata a un familiar o ahorrar para una eventual separación, pueden ser algunas de las alternativas.

Cuando ambos trabajan, ambos tienen derechos y obligaciones en el manejo de las ganancias. Algunos acuerdan en un “pozo común” para los gas. Lo que sobra se ahorra, se emplea en gastos de excepción o se destina a lo que cada uno quiere.

Sin embargo, no siempre se dice todo lo que se gasta: a veces por evitar reproches o culpa, o simplemente porque "es mi plata” o “yo la gané y la gasto como quiero”.

Las mujeres que ganan más que los hombres tienden a esconder gastos por miedo a que ellos se sientan en desventaja, más aún si está desocupado. Otras se adaptan al menor presupuesto del hombre y se restringen en salidas o vacaciones y están las que ceden todo sin importar las diferencias. La mujer con mayor salario cuida la imagen para no resentir el rol del padre frente a los hijos.

No es igual la actitud de los hombres hacia sus compañeras desocupadas: cuanto más gana el varón más refuerza la idea de que ella debiera sentirse orgullosa del hombre que tiene a su lado.
Pero ocultar gastos o mentir para no generar problemas, encubre deslealtades vinculares, no sólo monetarias.

La infidelidad -cuando existe- exige atención, cubrir demandas, inventar excusas y estar alerta para no despertar sospechas. lo que lleva a hacer gastos en efectivo por temor a que sean descubiertos en los resúmenes de tarjeta, a reducir los aportes al vínculo “legal”, o a endeudarse con créditos o con amigos compinches.

En algunos casos los egresos de dinero “no blanqueado” pueden ser inducidos por juego patológico o ludopatía, uso de drogas, compulsión por las compras, adicciones sexuales, etc. La persona, tanto hombre o mujer, miente y esconde gastando más de la cuenta o hipotecando bienes.

En cualquier situación -si existe- es un tema a pensar, replantear y tratar de revertir. Estas prácticas no llevan a buen puerto ninguna relación.

La igualdad de la riqueza debe consistir en que ningún ciudadano sea tan opulento que pueda comprar a otro,y ninguno tan pobre que se vea necesitado de venderse.
J.J. Rousseau -
escritor, filósofo, músico, botánico y naturalista franco-helvético (1712-1778)


Fuente: extractado y adaptado entremujeres.com - Dr. Walter Ghedin

4 comentarios:

  1. Un pecular problema más común de lo que creemos, y que deteriora cualquier relación.

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    1. Es cierto, comparto y agradezco tu comentario Anónim@. Un saludo.

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  2. Esas pequeñas mentiras, .... que despues lamentamos.

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    1. Es cierto, a veces no tenemos conciencia de en que pueden terminar esas pequeñas -a veces no tan pequeñas- mentiras. Gracias por comentar.

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