"Aléjame de la sabiduría que no llora, la filosofía que no ríe y la grandeza que no se inclina ante los niños.”
Khalil Gibran -
poeta, pintor, novelista y ensayista libanés ( 1883 - 1931 )
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jueves, 21 de diciembre de 2023

Nochebuena, Navidad - ... y algunas reflexiones

"La Navidad es la luz que rompe la noche oscura de los siglos." - Joan María Canals – Teólogo, Misionero Claretano (1936-2022)

Navidad -conocida desde siglos atrás como festividad religiosa-, desde el 1900 y tantos ha ido perdiendo paulatinamente su carácter como tal. Tal vez como alguna vez dijo el astrónomo, filósofo, teólogo, matemático y poeta italiano Giordano Bruno allá por el siglo XVI, “Las religiones no son más que un conjunto de supersticiones útiles para mantener bajo control a los pueblos ignorantes” y cada vez son mas quienes se adhieren a esa línea de pensamiento, lo que se ve reflejado en la disminución de aquellos que manteniendo su fe siguen respetando y recordando la historia del Divino Niño nacido en Belén, así como el aumento de los descreídos que han convertido estas fechas en un festejo 'sui generis' de características singulares, donde predominan las compras influenciadas por una oferta variada y exuberante donde el marketing no es ajeno y los excesos en bebida y comida justificados por las reuniones familiares o de amigos, donde el sentido religioso se diluye y desaparece.

Ante esta situación que con una celebración 'social' parece querer emborrachar los sentidos y ocultar los problemas que la sociedad carga se nos olvida que todos no están incluidos en esos llamados 'festejos', ya veces es bueno recordar que esos marginados de la vida por Existen diferentes circunstancias y sólo pueden asistir desde su soledad. al mundo privilegiado de otros.





Para reflexionar quiero recordar aquí un cuento de Eduardo Galeano de 'El libro de los abrazos', llamado 'Nochebuena' .

“Fernando Silva dirige el hospital de niños en Managua.

En vísperas de Navidad, se quedó trabajando hasta muy tarde. Ya estaban sonando los cohetes, y empezaban los fuegos artificiales a iluminar el cielo, cuando Fernando decidió marcharse. En su casa lo esperaban para festejar.

Hizo una última recorrida por las salas, viendo si todo queda en orden, y en eso estaba cuando sintió que unos pasos lo seguían. Unos pasos de algodón; Se volvió y descubrió que uno de los enfermitos le andaba atrás. En la penumbra lo reconocí. Era un niño que estaba solo. Fernando reconoció su cara ya marcada por la muerte y esos ojos que pedían disculpas o quizás pedían permiso.

Fernando se acercó y el niño lo rozó con la mano:

-Decile a... -susurró el niño-
Decíle a alguien, que yo estoy aquí.
……

Un texto  melancólico, doloroso, que puede identificar a una gente de cualquier edad en cualquier parte de éste nuestro mundo desapegado y egoísta. Tal vez leerlo nos vuelva más conscientes y nos devuelva a esa tierra de paz con la esperanza de que con fe o sin ella, con religión o sin ella, con villancicos o sin ellos, con fuegos artificiales o sin ellos, con brindis o sin brindis, con Papá Noel o sin él, con regalos o sin ellos, podemos en algún momento encontrar un mismo lenguaje en el que nos entendamos, confraternizando, incluyéndonos a todos, donde el 'amor' sea un sentimiento y la paz un estado, más que palabras. vacías, … donde celebraremos con la genuina alegría de poder 'estar' y deseamos una ... 'Feliz Navidad' !!!. 

“La Navidad no es un acontecimiento, sino una parte del hogar que uno lleva siempre en el corazón”. - Freya Stark - exploradora y escritora británica (1893-1993)

viernes, 23 de diciembre de 2022

Rescatando humanidad - Navidad, ... Cristo, Papá Noel, arbolito, ... y una inquebrantable esperanza

“La Navidad no es una fecha; es un estado en la mente.” - Mary Ellen Chase - educadora, maestra, académica y escritora estadounidense (1887-1973)

Dice una frase del novelista y político francés André-Georges Malraux que “La tradición no se hereda se conquista”, y en éstos días a escasas horas de la celebración de Noche Buena y Navidad, nada más cierto, tiempos en que nos vemos atrapados por esas costumbres que hacen al universo familiar y al mundo en general.

Fechas atravesadas por distintas ópticas para ver y celebrar, desde quienes tenemos una fe que nos sostiene en la creencia de la renovada llegada de Cristo, mezclada con la historia de un risueño Papá Noel, obeso y bondadoso hombre que viajando en su trineo tirado por renos atraviesa los cielos para repartir juguetes a los niños del mundo, y devenida hace ya muchos años en una suerte de descreída celebración donde rescatamos la unión de la familia como sustento para unirnos alrededor de una mesa compartiendo las horas de esos días.




Casas y ciudades intentan en la medida de sus posibilidades, proponer toda clase de opciones y alternativas que den marco a la celebración en la que no ha de faltar un arbolito con luces y globos multicolores, alrededor del cual se colocarán los regalos que intercambiaremos con nuestros familiares y amigos cercanos, sin olvidar la gastronomía que hace a la ocasión.

En tiempos difíciles, con un mundo que muestra su crispación de diferentes maneras, tal vez aquí podemos rescatar la posibilidad que estas fechas nos dan, de sentir que aún estamos a tiempo para dar paso a ese lado humano que tenemos olvidado, … mientras podamos seguir haciéndolo, y aún a pesar de los duelos que cada uno tenga en lo personal, valdrá la pena seguir celebrando cada año una nueva Navidad, con la inquebrantable esperanza de un mundo mejor y en paz que nos abarque a todos por igual.

“No existe la Navidad ideal, solo la Navidad que usted decida crear como reflejo de sus valores, deseos, seres queridos y tradiciones.” - Bill McKibben - medioambientalista estadounidense contemporáneo

viernes, 24 de diciembre de 2021

Tiempo de esperanza, reconciliación y agradecimiento - Navidad resignificando la paz y revitalizando la fé

'La incapacidad de abrirse a la esperanza es lo que bloquea la confianza, y la confianza bloqueada es la razón de los sueños arruinados.' - Elizabeth Gilbert

Desde comienzos del 2020, venimos viviendo de manera diferente, la pandemia provocada por el Covit-19 nos ha obligado a mantenernos encerrados en nosotros mismos, sumergiéndonos en una suerte de aburrimiento obligado que nos ha desconectado –sin que nos demos cuenta-  de las ganas de vivir. Estamos finalizando casi el 2021 y aunque ha habido mejoras, la situación se sigue manteniendo con menos riesgos del punto de vista sanitario permitiéndonos flexibilizar las conductas que nos oprimían.

Y esto me hace recordar un texto del escritor argentino Gabriel Velxio, que se refiere a esa materia pendiente que éstos tiempos nos han impuesto, los abrazos que no hemos podido dar, y que llegando la Navidad parece ser el momento obligado y necesario para hacerlo realidad,

'Estoy haciendo una lista con los abrazos que debo. Y la verdad, no sé si comenzar por abecedario, o residencia, por fecha o distancia, por necesidad o urgencia. Lo importante en todo caso, sería comenzar ahora, y que por orden de llegada, el afecto nos sorprenda.'





La esperanza renovada en ésta Navidad del 2021, aún manteniendo ciertas distancias, aún con tapabocas, aún cuidándonos, nos permitirá dar esos abrazos que salen del corazón expresando los mejores sentimientos y deseos.

Sabemos sobradamente que además de las situaciones ocasionadas por la pandemia muchos hay que por causas personales no tendrán motivos para festejos, y eso es inevitable. Sin embargo sintámoslo como tiempo de reconciliación de perdonar y perdonarnos, de tolerancia, de agradecimiento, de generosidad y alegría en el corazón, tiempo de resignificar la paz y revitalizar la fé, tiempo de sentirnos vivos y comprometernos con el futuro con la esperanza de que el mundo colectivamente se abrace.

Feliz Navidad  2021 !! 

‘La esperanza es el único bien común a todos los hombres; los que todo lo han perdido la poseen aún.’ – Tales de Mileto - filósofo y matemático griego (624-546 aC)

martes, 22 de diciembre de 2020

Navidad 2020 - resignifiquemos los símbolos

"Hay esperanza después de la desesperación, y muchos soles después de la oscuridad." - Rumi

Estamos a escasas 48 horas de Navidad, tiempo de rituales y tradiciones, que en éste 2020 serán diferentes debido  a la pandemia de la Covit-19 que soporta el mundo y la sociedad, sin embargo demos nuevo significado a los símbolos, démonos permiso para volver a ser niños experimentando el creer y confiar, valorando la vida con alegría y con ella seamos felices disfrutando del ser y estar aquí.

Como dice una frase de un maestro Zen: ‘Cuando sentí que lo había conseguido todo, me di cuenta que el precio fue perder casi todo.  Que tu cabeza esté donde está tu cuerpo.’ No nos dejemos ganar por la tristeza, la decepción o el pesimismo, sin importar donde, como, o con quien estemos no permitamos que el miedo nos paralice, lo importante es seguir en camino.

Mantengamos las puertas de la vida abiertas a los milagros, … sabiendo que ellos suceden … tal vez ésta sea la oportunidad, en la que el distanciamiento nos obligue a apreciar que aún podemos sentir la felicidad de encontrarnos con nuestros afectos, sólo tratando de tener el coraje para seguir acercándonos de corazón a corazón, salvando así lo que nos separa.




Intentemos reir, reir mucho, a pesar de las dificultades, hasta hacer que el corazón baile, sabemos que no es sencillo cuando todo nos agobia, pero la risa entibia el alma y acostumbrémonos a valorar la soledad, esa en la que podemos encontrarnos con nosotros mismos, buscando el equilibrio sin perder la esperanza.

Pensemos que haríamos si éste fuera el ultimo día por vivir y decidamos decir ‘gracias, ‘lo siento’, ‘te amo’, aún tenemos la posibilidad, no desperdiciemos tiempo y energía en tonterías que no aportan nada a nuestra vida. Aprovechemos el presente y aseguremos el futuro.

Navidad una fiesta de origen pagano, que llega hasta nuestros días buscando revitalizar la Fé en el mundo obligándonos a una mirada distinta de nuestra vida. Renazcamos como seres humanos mejores, sabemos de la situación extremadamente difícil que muchos viven, pero hagamos que nuestro deseo de 'Feliz Navidad' sea genuino y generoso.

"Honraré la Navidad en mi corazón y trataré de mantenerlo todo el año." - Charles Dickens - escritor y novelista inglés (1812-1870)

martes, 24 de diciembre de 2019

Navidad - tiempo de alegria y momento de reflexión

"Honraré la Navidad en mi corazón y trataré de mantenerlo todo el año."
Charlos Dickens - escritor y novelista inglés (1812-1870)

Y una vez más hemos dado vuelta al sol, otra vez 365 dias han transcurrido y nos han traído hasta una nueva Navidad, esa celebración que abarca al mundo con un origen pagano, que fue evolucionando a través del tiempo e incorporando elementos de diferentes culturas y que aún con sus raíces cristianas se muestra con manifestaciones variadas.

Sabemos también que el hombre y sus circunstancias hacen que muchos no se sientan identificados para adherir a festejos, otros no puedan hacerlo debido a situaciones ajenas a su propia voluntad, y aún entre aquellos que si festejan tambien existe una diversidad de matices que irán desde la simple y superficial fiesta donde comer y beber exageradamente es todo  a lo que se apuesta, pasando por aquellos que lo ven como celebración religiosa, hasta quienes desde la perspectiva personal deciden no celebrar nada y verlo como un día común o los que intentan rescatar valores para seguir adelante.




Me atrevo a sentirme en un punto intermedio donde se pueda articular una celebración de y con los afectos, permitiéndose un espacio para la reflexión, un tiempo donde podamos encontrar lo que olvidamos muchas veces durante el cotidiano vivir, tiempo de reconciliación para aquello que nos rodea y con nosotros mismos, momento para aceptar y superar lo que nos paraliza, tiempo de entender que la vida es cambio y por eso nos dará dolores y alegrías, tendremos éxitos y fracasos, sufriremos pérdidas y nos sorprenderemos con lo nuevo que nos llegue.

Navidad, tiempo de perdonar y perdonarnos, tiempo de tolerancia hacia lo que no nos gusta, tiempo de agradecer por lo que tenemos y que a veces perdemos de vista, tiempo de alejar tristezas y mirar con esperanza y optimismo el horizonte, porque allí está el futuro hacia el que debemos caminar, tiempo de permitirnos ser generosos, tiempo de compartir y de sentirnos vivos.

Tiempo de amor, paz y alegría en el corazón,  ... a pesar de todos los pesares. 

Tiempo de decir …  Feliz Navidad !!!


"La Navidad no es un momento ni una estación, sino un estado de la mente. Valorar la paz y la generosidad y tener merced es comprender el verdadero significado de la Navidad."
Calvin Coolidge - Político y abogado, 30o.Presidente de los Estados Unidos (1872-1933)  

Imagen: pinterest

jueves, 22 de diciembre de 2016

Celebremos la esperanza ... - Navidad, ... en paz, con el corazón dispuesto y alegría en el alma

“Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres.”
Lucas 2.14

Todo es cíclico, las fechas se repiten e inexorablemente cada 365 días la vida se encarga de que volvamos a plantearnos ¿Qué significa para cada uno de nosotros la Navidad?, ¿la promesa de un renacer?, ¿una tradición que a través del tiempo ha ido distorsionando y diluyendo su esencia?, ¿una alegría real o impuesta por la sociedad?, ¿un mandato de comer y beber en exceso?, ¿cuál es nuestra expectativa y estado de ánimo?.

Empeñosamente la Navidad nos ilumina a través de los siglos, llega hasta nosotros a pesar de la injusta sociedad en que vivimos, que hace que no todos puedan festejar, lugares del mundo con conflictos bélicos, lugares del mundo donde el hambre impera, y en cualquier parte del mismo mundo, quienes viven en soledad, sufren enfermedades, o el desamparo los aisla, sin olvidarnos de las situaciones particulares que cada quien vive, ausencias recientes, carencias, preocupaciones, falta de libertad, injusticias, falta de amor, o simplemente indiferencia.


Lo cierto es que el entorno se impone y aunque algunos manifiesten que preferirían pasar por alto éstas fechas, debemos rescatar e insistir en lo profundo del significado de ‘renacer’ que ella implica, que no es precisamente una felicidad asegurada sino la esperanza de que la vida continúe dándonos nuevas oportunidades, y esa es una posibilidad que a todos se nos ofrece, así como -aún pretendiendo sentirnos más infelices de lo que realmente somos-, nos demanda detenernos y pensar en la generosidad y el acercamiento a la familia y los amigos.

En un mundo cada vez más alejado de los orígenes cristianos de la celebración, rescatemos el poder reunirnos, brindando, apostando por una vida mejor para todos, y para quienes conservamos la fé en el milagro de Belén, más allá de arbolitos, guirnaldas, expresión de buenos deseos,  intercambio de regalos, o discusiones sobre la real fecha en que según los historiadores ocurrió realmente el nacimiento divino, ir hacia una Navidad en paz, desde el corazón, en armonía, porque esa Navidad será lo que nosotros queramos hacer de ella, y para ello sólo es necesario que hagamos un compromiso con nosotros mismos para lograrlo.

Como alguna vez dijo el poeta peruano Manuel Scorza en un brevísimo fragmento de su poema 'Epístola de los poetas que vendrán', ' ... Mientras alguien padezca, la rosa no podrá ser bella; mientras alguien mire el pan con envidia, el trigo no podrá dormir; mientras llueva sobre el pecho de los mendigos, mi corazón no sonreirá. ...', por eso, mientras la Navidad nos siga convocando, celebremos la esperanza. Feliz Navidad mundo!!, ... en paz, ... con agradecimiento por la vida que tenemos, con alegría en el alma y el corazón generosamente dispuesto hacia quien lo necesite. 

imagen: Lorenzo Costa/ pintor italiano

“La Navidad es la temporada para encender el fuego de la hospitalidad en el salón, la llama genial de la caridad en el corazón.”
Washington Irving – escritor estadounidense (1783-1859) 

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Renovar la fé - Navidad, tiempo de renacer, una oportunidad de ser mejores

“La navidad agita una varita mágica sobre el mundo, y por eso, todo es más suave y más hermoso.”
Norman Vincent Peale - Escritor, editor, orador motivacional y religioso estadounidense (1898-1993)


El alejamiento de Dios en la sociedad es cada vez más evidente, y los festejos de éstas fechas se centran en reunirse con familia y amigos, generalmente compartiendo comidas e intercambiando regalos con alegría, mientras que aromas, tradiciones y costumbres también hacen al momento, pero distante de la verdadera razón de esa celebración.

La liturgia de la Navidad pone el énfasis en la justicia, la fraternidad, la libertad y la paz que Jesús vino a traernos y cuya concreción demanda nuestra colaboración. Hagámonos eco de esos valores y demos paso a las iniciativas que colaboren y favorezcan a esa justicia y fraternidad tan vapuleadas defendiendo la libertad y la paz que todos merecemos.


Permitámonos dar lugar en nuestra vida al niño que alguna vez fuimos, ese niño bueno, sincero, sin prejuicios, con el alma limpia y el corazón dispuesto, sintamos y demos amor, sin titubeos, el mundo lo reclama y necesita. Tambien desde éste momento presente repasemos los errores en que hemos incurrido, los egoísmos, los rencores, permitiéndonos la reconciliación con nosotros mismos y con quienes nos rodean, dándonos nuevas oportunidades, abiertos a renacer como seres humanos mejores.

Sabemos que éstas fechas no alejan problemas, enfermedades, ausencias, sólo podemos desear que éste tiempo sea benévolo y traiga esperanza para aquellos que sufren guerras, violencia, hambre, que el espíritu de la Navidad nos abarque e ilumine, más allá del significado religioso de la celebración, y podamos reunirnos sintiendo que hay mucho que festejar, si logramos hacerlo alejándonos de las procupaciones, las obligaciones, la indiferencia, encontrando motivos e ilusiones porque seguir viviendo, podremos una vez más decir que será una Feliz Navidad.

Renovemos nuestro compromiso con los valores que nos hagan crecer como seres humanos, … renovemos nuestra fé en el milagro de Belén.

Imagen: Adoración de los pastores; Bartolomé Esteban Murillo

“ … Y la Palabra se hizo carne, y puso su Morada entre nosotros, y hemos contemplado su gloria, gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad.” - Juan 1, 1-18
 

sábado, 20 de diciembre de 2014

Navidad - ... esa magia especial

" ...Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón." - Lucas 2, 1-7

Cada diciembre nos lleva hacia Navidad, de la que estamos a sólo cuatro días y a la finalización de otro año, hacen que nos veamos sumergidos sin darnos cuenta, en compras, preparativos, y un clima festivo, alegre, de una euforia especial, y aunque sea una obviedad señalarlo, con el tiempo se ha ido distanciando cada vez más de su génesis religiosa.

Hacemos proyectos a partir de sueños acariciados, nos llenamos de espectativas, y por algún motivo la sensibilidad está a flor de piel, acercándonos al recuerdo de aquellos que ya no están, a la nostalgia por los que están lejos, al afán de reunir los afectos, a la recreación de tiempos pasados y al deseo de paz, abundancia y felicidad para quienes nos rodean y el resto del mundo.

Navidad es tiempo de compartir con ternura pero sobre todo con generosidad, es tiempo de familia y amigos, de buenos deseos, de intercambio de regalos, pero tambien es tiempo de recordar que muchos no tienen las mismas posibilidades, que algunos viven guerras, hambre, enfermedades, injusticias o simplemente soledad ... es tiempo de abrir el corazón y extender la mano abierta a quien lo necesite sin importar difrencias de clase, color o religión.

Es tiempo de sentirnos más buenos  y de comprometernos a seguirlo siendo todos los días, es tiempo de creer en el poder del amor, es tiempo de renovar esperanzas y volver a tener fé en la familia que sostiene y aporta valores y en el hombre involucrándose para alcanzar un mundo mejor.

Miremos el futuro con confianza, sin olvidar el milagro de Belén, que hace dos mil años (más allá de la fecha que no coincide exactamente con la celebración), cambió la historia trayéndonos hasta aquí, dejémonos ganar por la emoción y los sentimientos, pero tratemos de trascender los regalos y saludos colocando la intención en poner lo mejor de nuestra parte, porque lograr una feliz Navidad que nos abarque a todos por igual. ha de ser responsabilidad y construcción de todos.

Feliz Navidad a todos !!, ... en paz, ... con amor y alegria. 

"Bendita sea la fecha que une a todo el mundo en una conspiración de amor."
Hamilton Wright Mabi - Doctor en derecho, ensayista, editor, crítico y profesor estadounidense  (1846-1916)

jueves, 26 de diciembre de 2013

El duelo - melancolía y tristeza que opaca festejos en Navidad y Fin de Año

"He sospechado alguna vez que la única cosa sin misterio es la felicidad, porque se justifica por sí sola." Jorge Luis Borges - escritor argentino (1899-1986)

Navidad y Fin de Año son fechas de risas, fiestas y alegría contagiosa... y con ella sus rituales, poner el árbol, las luces navideñas, el turrón,  reunirse en familia, ... pero no es así para todos.

Para muchos, esta no es una época festiva, sino fechas llenas de melancolía. La memoria de un ser querido fallecido o que ya no está presente en su vida, el recuerdo de un estilo de vida previo, la pérdida de un empleo o propiedad o la difícil situación económica son algunas de las razones que sumergen a muchos en una tristeza que en ocasiones provoca un estado de depresión difícil de superar.

Las emociones, sentimientos y recuerdos aparecen en esta época, pero también el dolor, la nostalgia, la soledad y la tristeza, por pérdidas familiares, de pareja, de expectativas, de lejanía, soledad o salud.

La felicidad no puede forzarse, y muchos sentirán que su situación es la peor y no es entendido. Es común escuchar frases como: “A mí no me gustan las navidades”; "me gustaría dormirme y que hubieran pasado las fiestas”, “me gustaría poder ir a un lugar en dónde no tuviera que celebrar nada”,  "borraría esta época del calendario”.

Cada pérdida es un "pedazo" de nuestra historia que queda en el camino, -por ello el duelo-, algo en nosotros también muere o se transforma. Aprender a vivir manejando el duelo y la tristeza es una tarea necesaria.

Todos somos libres de sentir y vivir el presente como queramos o podamos, puede incluso haber quienes simplemente no les guste ese tipo de celebraciones, pero hay que afrontar la vida como se presenta muchas veces para no entristecer ni opacar esas fechas para quienes nos rodean.

Tal vez intercambiar ideas antes del momento sobre que cosas omitir en los festejos, puede ser útil y tener en cuenta la participación de los niños para que conozcan los motivos, no privándoles de la alegría que merecen tener.

No es tan difícil ser feliz en Navidad o Fin de Año; actitud e ilusión pueden ser de gran ayuda para aprender a disfrutar de esa felicidad, -lo que no significa olvidar- aún a costa de hacer un esfuerzo para lograrlo. Finalmente redundará en beneficio para quien logre superar más rápidamente sus duelos.

"El hilo de la vida se aflojaría si no fuera mojado con algunas lágrimas."
Pitágoras - filósofo y matemático griego (570AC-495AC)

domingo, 22 de diciembre de 2013

Navidad o dia de la familia - una celebración a mantener

"... la palabra era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre ..."  -  San Juan - 1,1-18

La celebración de la Navidad es símbolo de fiesta y alegría aunque cada día menos una fiesta religiosa y cada día más un festejo familiar.

Quizás deberíamos maravillarnos que a pesar del materialismo que rodea la navidad, de leyendas como papá Noel, la influencia de aquel niño que nació en Belén sigue estando, pero se ha convertido en una fiesta familiar.
 

Es bueno que la familia se reúna, que se vea, será una manera de que el amor y la familia sigan existiendo, asentados hoy sobre aquella humilde familia del pesebre de Belén.

La Navidad de Jesús es una Navidad religiosa, sin embargo alegrémonos que aun en medio de la navidad mercantil siga existiendo el amor entre nosotros y que la familia sea la cuna y el sostén de ese amor.


La Navidad sirve frecuentemente para hacer un alto en la vorágine de nuestra vida y a veces hasta cambiamos en algo. Lo bueno sería que este cambio se arraigara en nosotros. Si el encuentro sirve para amarnos un poco más, ya es Navidad en nuestro interior.

Si estamos atentos a lo que otros necesitan, será una forma de salirnos de nosotros mismos y el amor crecerá, convirtiéndose en una fiesta para todos. Una Navidad que estará por encima de arbolitos, guirnaldas, banquetes y hasta por encima de aquel portal de Belén, porque el espíritu de aquel pesebre está en que todos seamos parte de la Navidad, de la forma que cada uno pueda y quiera.

Para el cristiano la fiesta de la Navidad tiene tres dimensiones: mira hacía el pasado, mira hacia el presente y sobre todo mira hacia el futuro.

Navidad significa que el Redentor ya ha venido, según el Antiguo Testamento, pero al mismo tiempo es la esperanza del Nuevo Testamento, que la llegada de Jesús se concrete en el corazón de cada hombre, caminando hacia un mundo mejor.

Día de la Familia. es la denominación en un Estado laico, o para las personas que así lo sienten, pero eso no impide su celebración por todos con independencia de religiones, de creyentes o no creyentes.

La imagen del nacimiento del Redentor, es la imagen de La Familia, célula básica de nuestra sociedad. Esa misma familia que hoy, aquí y en este mundo de locura, sufre modificaciones y deterioros, presencia y tradición. Esa familia que aún en sus cambios de constitución debe dar sostén y valores a la sociedad.

Detengamos la urgencia del cotidiano vivir y acudamos por un instante a un sitio de nuestros corazones para reflexionar  proponiéndonos cumplir los sueños y lograr los desafíos que los próximos 365 días nos traigan, tratando de ser más justos, tolerantes y solidarios de lo que fuimos hasta hoy.
Que ese día nos encuentre reunidos alrededor de la mesa, para brindar juntos.  Feliz Navidad para todos !!!.

"Se toleren unos a otros y se perdonen si alguno tiene queja contra otro. Perdonar como el Señor os perdonó a vosotros." – Colosenses 3:13
 

viernes, 20 de diciembre de 2013

Villancicos - música de los pueblos cristianos

“Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año”. 
Charles Dickens  -  Novelista inglés  (1812-1870).

En sus orígenes, en el siglo XV, el villancico no tuvo contenido religioso. Eran canciones sencillas, canción campesina que reflejaban la vida en las villas. Hablaban de los sucesos que acontecían en la comarca y se cantaban en las fiestas.

De todos ellos, se desarrolló con más fuerza el que hablaba de la Navidad y ha llegado hasta nuestros días, como construcciones poéticas y composiciones musicales populares, sencillas y breves

Aquí les dejo tres canciones tradicionales: Noche de Paz, El niño del tambor y Los reyes Magos, tres estilos diferentes, un único sentimiento.





Forman parte de la cultura literaria y musical de pueblos cristianos y se refieren al nacimiento de Jesucristo, a la vida de la Virgen María, al canto de los ángeles por el nacimiento de Jesús y a cualquier tema relacionado con la venida del hijo de Dios a este mundo.

Surgen en el Renacimiento español y través del tiempo fueron modificándose hasta la actualidad en que son parte de los rituales exclusivos de la Navidad o Reyes Magos.

Una manifestación de alegría, que aún para quienes están alejados del sentimiento cristiano de la Navidad y sólo lo viven como celebración de familia, no debería perderse. 

Videos: VIRecords / jrmc235 / LaMusicaDeNavidad

“¿Quién que ha nacido cristiano y que ha oído renovar cada año, en su infancia, la leyenda poética del Nacimiento de Jesús, no siente en semejante noche avivarse los más tiernos recuerdos  de los primeros días de la vida?”
Ignacio Manuel Altamirano - Escritor mexicano.(1834-1893) Frase tomada de su obra: Navidad en las Montañas.
  

jueves, 19 de diciembre de 2013

Hans Christian Andersen - la Navidad de los olvidados

"La miseria seca el alma y los ojos además"
Rosalía de Castro - Poetisa y novelista española (1837-1885)

"La niña de los fósforos", pequeña gran obra de la literatura infantil del escritor danés Hans Christian Andersen, un cuento navideño donde el autor enseña a ver más allá de la superficie de las cosas, a saber observar la realidad más cruda.

El mismo vivió en una espantosa pobreza y vio muchas cosas terribles mientras crecía, Salió adelante gracias a su inteligencia, y a personas generosas que le dieron estudios. Sin embargo, esto lo marco de por vida y siempre simpatizó con las clases menos privilegiadas. Emparentado con la obra de Víctor Hugo y Mark Twin, en su obra refleja la dura vida de los pobres.

Resumen del argumento - La niña de los fósforos:

"Un día de Navidad, una niña busca la luz y el calor de los pequeños fósforos que había intentado sin éxito vender durante el día. Las luces, se suman a todas las luces de la Navidad, empezando por la luz original que significó el nacimiento de Jesucristo, y, como ellas, hablan de una esperanza en otra vida «donde no haya frío, ni hambre ni miedo".

El contexto es una época de hambre, miseria y un enorme fanatismo religioso. El escritor trataba de dar lecciones morales a los niños, no para aterrorizarlos, sino para sensibilizarlos. Es por eso que sus cuentos tienen una fuerte raigambre religiosa.

La luz de “unas cerillas” son la metáfora de la felicidad, producto de la imaginación de una niña, y ésta le permite transitar hacia otros estados y aliviar así el dolor que le produce tanto desamparo. Luz y obscuridad enmarcan un mundo dentro de otro, donde seres producto de la fantasía pueden despertar la ilusión y satisfacer el deseo de ternura y protección. Una historia triste, teñida de tragedia, desoladora y con una mirada dolorosa de la realidad circundante en un mundo frío, que mira sin ver, hostil y despiadado.

Este cuento es uno de los más crudos de Andersen, pero hermoso. Tal vez el autor sabia que la hipotermia causa alucionaciones en su fase final, y utiliza ese recurso. En su agonia, la anónima niña alucina con las cosas que nunca tuvo y con la única persona que extrañaba. En su época, a muchos les rompió el corazón y aun lo sigue haciendo, pues sigue siendo actual. Imaginarse a la pobre niña forzada a trabajar bajo condiciones extremas, hambrienta y sin ropa, que muere en el olvido, recordando un tiempo en que era feliz, miranda la premonición  de su propia muerte -“cuando una estrella cae, alguien muere”- 

Un hecho dramático que se sigue repitiendo una y otra vez, -hoy como cuando Andersen escribió la historia- en muchas partes del mundo. Hay cosas que no cambian, que son omnipresentes y una de esas es la miseria, esa miseria extrema que convierte en cruel injusticia la vida de muchos niños sin oportunidades. La celebración de la Navidad, no es igual para todos, muchos no pueden disfrutar ni tienen que celebrar. Hoy no hay niños vendiendo fósforos, pero hay muchos viviendo en el mayor desamparo en un mundo que conoce su existencia pero la ignora, mostrando egoísmo e indiferencia.


"La realidad y la miseria me oprimen. y, sin embargo sueño todavía"
Emile Zola -  escritor francés 1840-1902)