"El hombre sensato cree en el destino; el voluble en el azar."
Benjamín Disraeli - político, escritor y aristócrata británico (1804-1881)
El Hilo Rojo es una leyenda anónima de origen oriental
muy arraigada entre los chinos y
japoneses que dice que todas las personas están unidas entre si por un hilo
rojo que viene con ellas desde su nacimiento como nexo entre todo aquello que
está destinado a encontrarse a pesar del tiempo y el espacio.
El hilo rojo invisible conecta a quienes están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper. existe independientemente del momento de sus vidas en el que las personas vayan a conocerse y no puede romperse en ningún caso, aunque a veces pueda estar más o menos tenso, pero es, siempre, una muestra del vínculo que existe entre ellas y no se refiere únicamente a la relación de pareja, sino a todas aquellas relaciones afectivas que acompañaran a lo largo de la vida..
Hay variantes para la historia, yo compartiré aquí tres de ellas.
"Un anciano que vive en la luna, sale cada noche y busca entre las almas
aquellas que están predestinadas a unirse en la tierra, y cuando las encuentra
las ata con un hilo rojo para que no se pierdan."
La leyenda china cuenta que…
"Wei Gu, vecino de Dulin, quería casarse a una edad temprana. Sin embargo, todas sus propuestas de matrimonio eran rechazadas. Durante el reinado de Tang Taizong (años 626 a 649) un viajero le comentó acerca de una joven doncella, la hija de un funcionario del gobierno de Qinghe, y lo invitó a encontrarse con la familia frente al Templo Longxing a la mañana siguiente.
Muy temprano, Wei Gu no pudo contener su impaciencia y se precipitó al templo. La luna todavía estaba en el cielo cuando llegó. Había un anciano sentado en los escalones del templo, recostado sobre un bolso, leyendo un libro bajo la luz de la luna. Wei Gu echó un vistazo al libro, pero no podía leer sus palabras, entonces con curiosidad preguntó al anciano, “¿qué tipo de libro está leyendo? Desde pequeño he estudiado muchas diferentes lenguas, hasta sánscrito indio. Pero debo confesar que nunca me he encontrado con la lengua escrita en este libro, ¿qué puede decirme sobre él?”
El anciano sonrió y dijo, “este no es un libro
escrito por seres humanos, proviene de ‘el mundo invisible’, ¿cómo podría usted
leerlo?” Entonces Wei Gu preguntó, “¿qué hace aquí alguien de ‘el mundo
invisible’?” El anciano contestó, “usted llegó demasiado temprano, no es que yo
no debiera estar aquí.”
“Dígame, ¿usted de qué es responsable?” preguntó Wei, “de los matrimonios de la gente” aseguró el anciano; Wei Gu se exaltó y dijo, “mis padres murieron cuando yo era pequeño, entonces me gustaría casarme a una edad temprana porque no quisiera que mi descendencia se extinga. Sin embargo, todas las propuestas de matrimonio que hice han sido rechazadas. Alguien me comentó sobre la hija del oficial Pan Fang, ¿piensa que ella se casará conmigo?” El anciano respondió, “No, ella no será su esposa. La mujer con la que usted se casará tiene ahora sólo tres años y se casará con usted cuando tenga diecisiete. En este bolso llevo un hilo rojo que uso para unir los pies de las parejas. Una vez que están destinados a casarse, ato sus pies con este hilo rojo. No importa si son enemigos, ricos, pobres o están separados por una larga distancia, mientras el hilo rojo esté atado, ellos se casarán”.
Wei Gu necesitaba saber más, “¿Quién será mi esposa?
¿Dónde vive ella?” El anciano contestó, “su futura esposa vive con una familia
que vende verduras, al norte del hotel”. “¿Puedo verla?” preguntó Wei Gu. El
anciano dijo, “ella siempre está con la anciana que vende verduras, venga
conmigo y se la mostraré”.
Las personas con las que Wei Gu tenía que encontrarse en el templo no aparecieron esa mañana. El anciano guió a Wei Gu al mercado. Al llegar allí, vieron a una anciana con un ojo ciego que sostenía a una niña de tres años. Ambas lucían muy sucias y feas. El anciano señaló a la niña y dijo, “Esa es tu esposa”. Wei Gu, en cólera, preguntó, “¿Puedo matarla?” el anciano respondió, “Esta niña está destinada a ser rica y a vivir una vida honorable y, además, encontrará la felicidad con usted. Por lo tanto, ¿cómo podría ser asesinada?” Al instante el anciano desapareció.
Una vez que Wei Gu volvió a su casa, le dijo a su criado, “Siempre has manejado bien mis asuntos. Si puedes matar a esta niña para mí, te recompensaré con 10.000 monedas”. El criado estuvo de acuerdo y se dirigió al mercado. Apresuradamente apuñaló a la muchacha y se alejó rápidamente.
Cuando el criado volvió, Wei Gu preguntó, “¿La has
apuñalado?” El criado contestó, “Traté de apuñalar su corazón, pero fallé,
entonces la apuñalé entre las cejas”.
Wei Gu siguió proponiendo matrimonio a distintas mujeres sin ningún éxito. Catorce años habían pasado cuando le ofrecieron trabajar para Wang Tai, un funcionario de defensa en Xiangzhou. Tiempo después Wang Tai le entregó la mano de su hija en matrimonio porque encontró que Wei Gu estaba altamente calificado. La esposa de Wei Gu tenía entre 16 y 17 años y era muy hermosa. Wei Gu estaba muy contento; sin embargo, observó que su esposa siempre ponía una pequeña flor artificial entre sus cejas y nunca se la quitaba, incluso cuando se bañaba.
Al final del año, preguntó a su esposa por qué siempre llevaba puesta una flor artificial entre sus cejas. Ella le dijo, “en realidad soy la sobrina de Wang Tai, no su hija. Mi padre era el líder de un condado y murió en funciones, mi madre y hermano murieron más tarde; yo era un bebé en ese entonces. Viví allí con mi niñera Chen, ella sintió lastima por mí y siempre me cuidó.
Sobrevivíamos vendiendo verduras. Cuando tenía tres años, estábamos en el mercado y repentinamente un loco me apuñaló entre las cejas dejándome una cicatriz que cubro con esta flor artificial. Aproximadamente 7 u 8 años más tarde, mi tío vino a Lulong para asumir un cargo. Me adoptó como su hija y me mudé con él, luego me casé con usted”.
Wei Gu asombrado indagó, “¿La niñera Chen tenía un
ojo ciego?” Su esposa contestó, “Sí, ¿cómo lo sabe?” Wei Gu confesó, “En
realidad, yo envié a aquel hombre loco. Esto es tan extraño”. Entonces relató a
su esposa la historia entera."
La más popular y la que se recita a los
niños y jóvenes cuenta que:
“Hace mucho tiempo, un emperador se entero de que en una de las provincias de su reino vivía una bruja muy poderosa que tenia la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino y la mando traer ante su presencia.
Cuando la bruja llegó, el emperador le ordeno que buscara el otro extremo del hilo que llevaba atado al meñique y lo llevara ante la que seria su esposa; la bruja accedió a esta petición y comenzó a seguir y seguir el hilo. Esta búsqueda los llevo hasta un mercado en donde una pobre campesina con una bebe en los brazos ofrecía sus productos.
Al llegar hasta donde estaba esta campesina, se detuvo frente a ella y la invito a ponerse de pie e hizo que el joven emperador se acercara y le dijo : “Aquí termina tu hilo”, pero al escuchar esto, el emperador enfureció creyendo que era una burla de la bruja, empujo a la campesina que aun llevaba a su pequeña bebe en los brazos y la hizo caer haciendo que la bebe se hiciera una gran herida en la frente, ordenó a sus guardias que detuvieran a la bruja y le cortaran la cabeza.
Muchos años después, llegó el momento en que este emperador debía casarse y su corte le recomendó que lo mejor era que desposara a la hija de un general muy poderoso. Aceptó y llegó el día de la boda y el momento de ver por primera vez la cara de su esposa, la cual entro al templo con un hermoso vestido y un velo que la cubría totalmente.
Al levantarle el velo vio por primera vez que ese hermoso rostro … tenía una cicatriz muy peculiar en la frente".
Explicación de motivos:
La arteria ulnar o cubital que irriga el dedo meñique
es la rama terminal interna de la arteria braquial –principal arteria
del brazo- derivada de una de las ramificaciones de la arteria aorta que sale
del corazón.
De allí surge la idea que los hilos rojos del destino unían los meñiques con el
corazón; simbolizando el interés compartido y la unión de los sentimientos. Por
ello se dice que ese hilo esta atado al dedo meñique.
Una hermosa y tierna leyenda que en cualquiera de sus variantes merece ser compartida.
La ilustración es una pintura de Zhu Yi Yong, pertenencientes
a su Serie Memoria. El motivo de juego infantil de Cat’s Cradle como un recuerdo del símbolo más famoso de China en
su historia de la Revolución, la estrella roja.
"Lo que deba ser, será."
Esquilo - dramaturgo griego (525-456 AC)
Muy interesante.
ResponderBorrarUna hermosa leyenda, casi mágica.
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