Niños y poemas - 'El señor don libro' y las letras de Gloria Fuertes para soñar y jugar

“Lo que se les dé a los niños, los niños darán a la sociedad.”

Karl A.Menninger – psiquiatra estadounidense (1893-1990)

Acompañando los tiempos difíciles de la España de comienzos y mediados del siglo XX, en momentos donde las mujeres no encontraban espacios en actividades fuera del ambiente del hogar y las tareas domésticas encontramos a Gloria Fuertes, una madrileña nacida en 1917 en una humilde familia, que debido al fallecimiento de su madre debió comenzar a trabajar desde los 17 años y que tempranamente había comenzado a escribir dedicando cada tiempo libre a hacerlo.

Escribió cuentos, poemas, teatro, historietas, para adultos y jóvenes aunque su preferencia fue la literatura para niños, publicó varios libros siendo premiada en diferentes oportunidades.

Les dejo el poema infantil ‘El señor don libro’ que aparece en su libro ‘Versos fritos’ una recopilación de poemas publicado en 1994.

Estaba el señor don Libro

sentadito en su sillón,

con un ojo pasaba la hoja

con el otro ve televisión.

Estaba el señor don Libro

aburrido en su sillón,

esperando a que viniera… (a leerlo)

algún pequeño lector.

Don Libro era un tío sabio,

que sabía de Luna y de Sol,

que sabía de tierras y mares,

de historias y aves,

de peces de todo color.

Estaba el señor don Libro,

tiritando de frío en su sillón,

vino un niño, lo cogió en sus manos

y el Libro entró en calor.

… …

Una mujer maravillosa, dinámica, optimista, referente de la literatura infantil de su época, que supo muchas veces ser políticamente incorrecta dejando en sus letras la denuncia de las miserias de ese tiempo, algo olvidada actualmente, que también participó en programas para niños de televisión española, y una poesía fresca, entrañable, actual hoy como cuando fue escrita, para ser recordada, disfrutada, dada a conocer y compartida con la gente menuda.

Sin duda es la infancia el mejor momento para acercar la poesía a los niños, palabras con ritmo y armonía que estimulan la sensibilidad, versos que son música con la que acompañar el vuelo de la imaginación, sonidos que dan color al mundo infantil enriqueciéndolo con ingenuidad y fantasía para soñar y jugar.

Nada mejor que hacerlo en fechas como ésta cuando -en mi país-, tomamos el 3er. domingo de agosto, para celebrar el ‘día del niño’, y aunque siempre habrá niños con otras realidades más duras, intentemos que la poesía les dé alas y en el clima de cercanía que este momento proporciona, disfrutar de ellos y con ellos, encontrando el niño que antes fuimos.

“La infancia tiene sus propias maneras de ver, pensar y sentir; nada hay más insensato que pretender sustituirlas por las nuestras." 
Jean Jacques Rousseau - filósofo francés (1712-1778)