Vida anodina ? - la importancia de hacer sin esperar reconocimientos

"Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo, y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa."

Mahatma Gandhi - 

Tantas veces tenemos la sensación de que la vida que llevamos es anodina, que nada relevante hacemos, que por nada especial nos destacamos, no somos conocidos por haber realizado algo especial que sea digno de reconocimiento, que a nadie realmente ayudamos como pretenderíamos hacer, en nadie influímos lo suficiente como para lograr cambios o mejorías y nos desmoralizamos pensando ¿cuál es nuestro cometido en éste brevísimo paso por el mundo?, ¿para que estamos aquí si nada importante hacemos?, ¿es que sólo tendremos la oportunidad de ‘pasar’ sin pena ni gloria por la vida?.

Siempre me gusta compartir aquí textos de quienes con mucho camino andado, conocimiento y sabiduría, nos aportan desde su visión de cada tema, enriqueciendo nuestro bagaje personal, para luego tomar una posición, y eso señala el fragmento de un relato del sacerdote jesuíta y psicoterapeuta hindú Anthony De Mello, de su libro ‘Un mundo para el absurdo’.

- “Lo que más me deprime es la absoluta vulgaridad de mi existencia. Jamás en la vida he hecho nada tan importante como para merecer la atención del mundo”.

- “Te equivocas si piensas que es la atención del mundo lo que hace que una acción sea importante”, dijo el Maestro.

Siguió una larga pausa.

- “Bueno, pero es que tampoco he hecho nada que haya influido en alguien, ni para bien ni para mal...”

- “Te equivocas si piensas que es el influir en los demás lo que hace que una acción sea importante”, volvió a decir el Maestro.

- “Pero, entonces, ¿qué es lo que hace que una acción sea importante?”

- “El realizarla por sí misma y poniendo en ello todo el propio ser. Entonces resulta ser una acción desinteresada, semejante a la actividad de Dios”.

… …

La reflexión entre el maestro y el discípulo a modo de conversación, en un cuento breve que nos acerca y ayuda a ‘ver’ con nuevos ojos nuestra realidad, sin importar, creencias o razas, en una suerte de juego sencillo, simple, donde el relato nos lleva a clarificar las ideas y despertar, dándonos cuenta que el reconocimiento no es lo importante, que la satisfacción llegará de hacer simplemente 'por el placer de hacer'.

No busquemos honras ni honores en lo que hacemos, la vida es como la vivamos, sin más, lo importante y lo que valoriza la vida, es poner nuestro mayor empeño para que eso que hagamos sea lo mejor que podamos hacer, en ello estará el mérito y eso será lo que en definitiva nos dará una vida plena, nos hará sentir satisfechos con nosotros mismos y felices por haberlo hecho, con generosidad, sin esperar nada a cambio.

"A veces sentimos que lo que hacemos es tan sólo una gota en el mar, pero el mar sería menos si le falta una gota."

Madre Teresa de Calcuta - religiosa misionera albanesa, Nobel de la Paz en 1979 , canonizada en 1915 (1910-1997)